Frente a la pérdida irremplazable de un cónyuge, un seguro de vida puede contribuir a facilitar el proceso de duelo
Todas las muertes de seres queridos y miembros de una familia son difíciles de asumir. En el caso de un cónyuge, la situación puede recrudecerse además de los inevitables lazos emocionales y afectivos, el evidente descenso en los ingresos familiares si es que contribuía a ellos. Los seguros de vida para viudos ayudan a hacer más fácil sobrellevar esta situación.
Uno de los primeros análisis que existen sobre la relación de viudedad y sus efectos en la situación familiar lo encontramos en Estados Unidos a mediados del siglo XX. El estudio titulado “Widows Study” se servía de una muestra de testimonios de viudas de aquel país, y se tomaba como referencia del papel de los seguros de vida en situaciones. Este trabajo supuso un antes y un después a la hora de establecer una regulación en Estados Unidos sobre este producto financiero. Explicaba sobre todo la necesidad de contratar capitales para mantener el nivel de vida por si sucedía una desgracia en el núcleo familiar.
En España se produjeron estudios similares durante los últimos años para medir el impacto y la importancia de tener contratado un seguro de Vida-Riesgo dentro de un matrimonio. Existen situaciones en las que resulta necesario contratar productos que sirvan para compensar la pérdida de ingresos en la economía familiar si se produce el fallecimiento de uno de los cónyuges.
El sistema público de previsiones de este tipo tienen una concepción limitada y difícil de mantener a largo plazo. Además de confiar en la viabilidad de este sistema, resulta determinante contar con una opción de empresas privadas para extremar precauciones en la estabilidad financiera de nuestra gente. Se trata de un complemento fundamental con la pensión proporcionada por el Estado, que en el caso de tener carácter de viudedad, su cifra ronda aproximadamente los 600 euros mensuales.
La situación de viudedad en la actualidad
En los últimos años se han experimentando cambios a la hora de afrontar la viudedad en nuestra sociedad. Si sucede la fatalidad del fallecimiento de un cónyuge en una unidad familiar con hijos, en algunas ocasiones existen miembros en edad de trabajar que no cuentan con una fuente de ingresos propia. Esto se debe a que actualmente la tasa de desempleo juvenil superior al 50%.
Si atendemos a las cifras de diversos estudios que dibujan el panorama de los viudos y viudas en España, actualmente se enumeran alrededor de 3,4 millones, que han visto mermados sus ingresos a una cifra se encuentra en 650 euros. Comparando la viudedad en términos de género, cada hombre que se queda viudo lo hacen cinco mujeres. Además, las mujeres viudas son las más perjudicadas económicamente, ya que sus ingresos descienden en más de 800 euros. Esta situación, sumada a la dura situación emocional y el sentimiento de ausencia del ser querido, provocan un deterioro del nivel de vida.
El contrato de seguro de vida con prestaciones de viudedad supone un alivio económico en una situación familiar delicada. La mayor parte de los ingresos que reciben los viudos proceden de seguros privados contratados. Será necesario calcular bien el capital asegurado, ya que en ocasiones no suele ser suficiente la estimación estándar del seguro de vida, en el que se asegura al menos cinco años de los ingresos habituales de la pareja.